¿Preparado para viajar?

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Este es el momento del año en el que se producen más desplazamientos, debido a las vacaciones estivales. En cualquier estación de tren, de autobuses, en cualquier aeropuerto la actividad se multiplica de forma masiva. Si preguntamos a los viajeros que esperan allí, junto a sus maletas, que es lo que les puede preocupar, nos responderán: la seguridad. A nadie se lo ocurriría pensar, que no haya sido revisado un avión a punto de despegar o un tren parado en el andén, todos damos por hecho que el examen habrá sido exhaustivo. La gran mayoría de viajes se realizan por carretera, en coches particulares. ¿Damos por hecho que antes de emprender viaje, han sido revisados? Cuando lo que está en juego es nuestra vida y la de nuestra familia, no podemos dejar nada al azar, hay que dedicar las primeras horas de asueto a poner nuestro coche a punto para ese largo viaje. Por dónde empezar da lo mismo, lo primordial es no dejar nada sin evaluar.  

Neumáticos

Son la única parte del coche que está en contacto con el pavimento y de ellos depende que nuestro viaje sea confortable y tranquilo. A veces intentamos alargar su vida, sin reparar en las consecuencias que pueden tener unos neumáticos en mal estado.
  • Dibujo: debe tener 2 mm; el mínimo permitido por ley para circular es de 1´6 mm.
  • Presión: la única forma de saber si está en los niveles óptimos es usando un manómetro en la gasolinera (cada 15 días aproximadamente sería lo ideal). Ante la programación de un viaje, hay que acudir a un taller para el calibrado seguro.
  • Estado: observar que no haya ningún tipo de abolladura, corte, algo clavado…
 

Amortiguadores

Son varios los síntomas que te pueden avisar de que esa parte de tu vehículo no está en las condiciones idóneas para ponerte en marcha. Si notas que tu volante vibra, aún cuando el pavimento está en buen estado, si sientes que oscila o si al frenar en seco se desvía incluso se hunde por la parte frontal, es el momento de que  unos profesionales miren esos amortiguadores.  

Frenos

El estado de los frenos puede tener una importancia vital para la tranquilidad en nuestro viaje. Las pastillas de freno son piezas de desgaste, por lo que con la frecuencia conveniente tienen que ser cambiadas. Lo mismo sucede con los discos de freno, se estima que entre 100.000 y 150.00 KM es la vida útil, aunque va a depender mucho del tipo de conducción y del uso del vehículo. El líquido de frenos sería la tercera parte a revisar, sin duda en este caso la mayoría no podemos saber a simple vista el estado, con lo que aprovechar la visita al taller es la mejor opción; no suele resultar demasiado caro, incluso a veces es gratuito.  

Luces

Son muchas las circunstancias que se pueden dar en la carretera, a veces somos demasiado confiados. Frases como: voy temprano ,llegaré de día, etc hacen que no pongamos atención en las luces, imprescindibles en la conducción, tanto para ver, como para ser vistos. Comprobar: luces de cruce, carretera, posicionamiento, antinieblas delanteras y traseras, luces de frenado y de marcha atrás. Muy importante: hacer el reglaje de faros con el coche cargado.  

Líquidos y refrigeración

Fundamental es comprobar el nivel de aceite, en este caso es algo sencillo que podemos hacer nosotros mismos con el coche parado y frío. Levantamos el capó, la varilla de medir tiene dos muescas, una señala el nivel mínimo y la otra el máximo. Hay que introducirla hasta el fondo. Al sacarla, la mancha de aceite debe estar entre las dos muescas. En caso de que quedara dicha mancha por debajo del mínimo, llegaría el momento de rellenar. El papel que juega este líquido es muy importante ya que ayuda a la lubricación de la piezas de rozamiento, la falta del mismo puede provocar que se funda el motor y la solución a eso solo sería acabar en el desguace. El agua, el líquido de refrigeración y el estado de los filtros, el agua del limpiaparabrisas, son los últimos detalles a los que un vistazo, se debe echar. Una vez que su coche está a punto, tiene la certeza de viajar más seguro y disfrutar de la conducción. No olvide llevar algo de comida, sobre todo si viaja con niños, y agua.   Feliz viaje.

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