Cuida el embrague
Publicado el 7 de diciembre de 2018
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Pasar por el taller, a lo largo de la vida de nuestro vehículo es inevitable, pero bien es cierto que en muchas ocasiones, podemos retardar esa visita.
Nuestra forma de conducir es determinante en el cuidado del coche. A veces por desconocimiento y otras por descuido, somos causantes de muchos de los problemas, con los que nos encontramos.
Por eso hay cosas que debemos tener en cuenta, cuando se trata de algunas averías, que podemos evitar.
El embrague
Una de las reparaciones más costosas es la del embrague, los malos hábitos en la conducción son la causa, de su desgaste y posterior avería. Alguno de los vicios que tienen muchos conductores:- Dejar la mano en la palanca de cambios, durante todo el tiempo. Ese gesto supone una carga extra de peso, que resulta muy perjudicial.
- Quedarse pisando embrague y con la marcha metida, cuando hay que detener el coche. Es algo habitual que hacemos,por ejemplo en los semáforos. Lo ideal es dejar el coche en punto muerto y no tener presionado el pedal.
- Arrancar de manera brusca, acelerando de golpe es otra de las formas, de estropear el embrague. La aceleración partiendo del coche parado, hay que realizarla de forma suave, para evitar entre otras cosas que patine el embrague. Además deberíamos esperar unos minutos, antes de emprender la marcha para que la mecánica del vehículo, alcance la temperatura adecuada.
- Conducir con el pie izquierdo, apoyado en el pedal, eso provoca que vaya patinando continuamente y se produce un gran desgaste.
- Mantener el embrague en las rampas, para eso está el freno y debemos mantener el coche parado, con él. Además hay que intentar, que el cambio de marchas sea lo más fluido posible, pisar el embrague y meter la marcha sin estrés, ni soltándola antes de tiempo.
- No entra una marcha, normalmente es debido a la rotura de una horquilla del selector de velocidades.
- Notamos ruido en la transmisión, porque tenemos falta de lubricante en la caja o en los diferenciales. Aunque también puede ser, por el desgaste de las holguras o semiejes.
- El coche avanza a trompicones, posiblemente por deformación, en los discos de fricción. En caso de sentir esos saltos en la conducción, hay que llevarlo a un taller de forma inmediata, para no tener que lamentar una rotura mayor.
- No podemos desembragar, la causa es que la caja de cambios, sigue conectada al motor y también es motivo de acudir, urgente al taller
